El alquiler de la vivienda es una opción que permite que muchas personas solventen su situación inmobiliaria para sí mismo y para su familia, pero es una alternativa que como todas las demás existentes tiene sus pros y sus contras. Por lo que es importante que los inquilinos conozcan al detalle todo lo que se debe hacer para garantizar el mayor de los éxitos al momento de arrendar una vivienda.
Una guía básica para que los potenciales arrendatarios se enfrenten a los propietarios con las mejores armas al momento de alquilar un piso, siempre con la plena intención de garantizar los mejores resultados para los inquilinos. Precisos consejos que determinan los puntos claves en los cuales debe basarse toda persona que está en la búsqueda de una vivienda de alquiler.
Aspectos antes de lograr el alquiler de una vivienda
El presupuesto es un punto claro de todo inquilino, al momento de establecer las prioridades y los precisos consejos para llevar a cabo el arriendo de una casa. Lo ideal es que los gastos de alquiler no superen un tercio de los ingresos brutos mensuales. En perspectiva, si se tienen ingresos mensuales de 2.100 euros, se debe mantener como máximo una cuota de alquiler que incluya otras posibles deudas, que no supere los 700 euros.
El arriendo además puede aligerarse a través de incontables ayudas relacionadas con el alquiler de la vivienda, generalmente establecidas por los organismos estadales y las Comunidades Autónomas, en pro de garantizar el correcto dinamismo del sector de los alquileres de vivienda y en general de todo lo relacionado con el sector de los bienes raíces.
El alquiler de la vivienda y los pagos de cada una de las partes
Por regla general, los contratos de alquiler se rigen por un reparto habitual entre las partes y a menos que el contrato de arredramiento exprese lo contrario, será el propietario quien se encargará del pago de aspectos relacionados con la comunidad de vecinos, los seguros de la casa y algunos impuestos como el IBI. Mientras que el inquilino se encargará de los suministros propios de la vivienda y de los servicios de agua, electricidad, gas y telecomunicaciones.
Las reparaciones ante el alquiler de la vivienda
El proceso de alquiler de la vivienda está plagado de preguntas y de controversias y uno de los detonantes es la llegada de algún proceso de reparación de averías provocadas por el uso habitual o en su defecto por el mal uso de la vivienda. La Ley de Arrendamientos Urbanos establece que el propietario está en el deber de llevar a cabo (sin derecho a aumentar la renta del alquiler) las reparaciones que se consideren necesarias para garantizar la habitabilidad de la casa. A menos que se demuestre que el deterioro sea imputable al inquilino según lo establecido en los artículos 1563 y 1564 del Código Civil.
La fianza por el alquiler de una vivienda
La prestación de una fianza en metálico equivalente a una mensualidad de renta del alquiler de la vivienda es obligatoria, según la Ley, para aquellos casos en los que el inmueble tendrá uso de vivienda y de dos meses cuando sea para otro uso. Pero adicionalmente se podrá solicitar otro tipo de garantía adicional, siempre y cuando no supere el par de mensualidades de renta.
Los mejores consejos antes de alquilar una vivienda
Analizar con detenimiento cada una de las opciones disponibles de alquiler de vivienda para verificar que es la mejor alternativa con respecto a las precisas necesidades personales. Aquí es importante tomar en consideración diversas variables como la ubicación de la vivienda, el tipo de vivienda, el valor del alquiler, y otros gastos asociados, entre otras.
Manejar un filtro con máximos disponibles a pagar por la renta del alquiler, esto permite desechar de inmediato todos los que están fuera del rango establecido, ahorrando tiempo y esfuerzo, recordando que el tope de gastos recomendados no debe superar el 30% de los ingresos totales y verificar con el casero los costes de los servicios, para analizar si se adaptan al presupuesto existente.
Toma nota de todo al momento de visitar las potenciales viviendas a ser alquiladas, para después establecer una detallada comparativa de cada una de ellas, manteniendo un especial interés en las cosas que hacen falta en cada piso y que debes conseguir a mediano plazo. Alcanzando el mejor de los pisos y revisando con detenimiento el contrato de alquiler y evitar desagradables sorpresas en un futuro cercano.