En un mundo en el cual la sostenibilidad y la eficiencia energética se han vuelto prioritarias, comprender el gasto energético de nuestros electrodomésticos se ha convertido en una necesidad. Y es que, saber cuánta energía gastan cada uno de los aparatos de nuestra casa, puede ayudarnos a optimizar su funcionamiento.
Por eso, la OCU ha llevado a cabo un análisis del gasto energético de distintos electrodomésticos y hoy vamos a centrarnos en uno de los que muchas personas utilizan en su día a día: la secadora de ropa. Así que, si quieres saber cuánta luz gasta una secadora de ropa, continúa leyendo.
Cuánta energía gastas cuando usas una secadora de ropa
A la hora de analizar el consumo de las distintas habitaciones de la casa, está claro que, la que se lleva la peor parte, es la cocina. En ella encontramos electrodomésticos como lavadoras, neveras o lavavajillas, los cuales tienen un gasto energético muy elevado.
Pero existe otro dispositivo que en ocasiones pasa desapercibido y que también puede hacer que el importe de tu factura de la luz se incremente de manera considerable: la secadora de ropa. Y es que, según la OCU, este es uno de los aparatos que encabezan el ranking de electrodomésticos con mayor gasto de luz.
Esto es lo que dice la OCU sobre el gasto eléctrico de las secadoras de ropa
Pero, antes de contestar a la pregunta sobre cuánto cuesta secar nuestra ropa, debemos hacer una pequeña apreciación y es que esto va a variar dependiendo del modelo y tipo de secadora que elijamos. De manera que, si tenemos una secadora más antigua, podemos estar seguros de que la eficiencia energética de la misma va a ser menor que en una más moderna.
No obstante, sí que podemos hablar de cifras medias y, en este caso, según la OCU estaríamos hablando de un consumo medio de 2,1 kWh. Un dato que podemos trasladar fácilmente a euros teniendo en cuenta que el coste medio de las tarifas a día de hoy es de unos 0,15 € por kWh. Por lo que, en este ejemplo, podemos decir que poner nuestra secadora nos costaría unos 0,31 € por hora.
Este dato tendremos que multiplicarlo por todas las veces que pongamos nuestra secadora al mes y, de esta forma, tendríamos el coste aproximado que vamos a pagar en nuestra factura simplemente por poner la secadora.
Qué tipo de secadoras de ropa son las que gastan menos energía
Como acabamos de ver, las secadoras de ropa tienen un gasto energético que, aunque puede parecer no demasiado alto, sí que influye en nuestra factura de la luz. Ten en cuenta que, a este gasto, tendremos que sumarle el del resto de electrodomésticos de tu vivienda.
No obstante, existen algunos tipos de secadora para la ropa que tienen una mayor eficiencia energética, por lo que elegir uno de estos modelos puede ser clave a la hora de bajar al mínimo su consumo. Te indicamos los dos principales a continuación.
Secadoras de condensación
Se denominan así a aquellas que utilizan un proceso de enfriamiento para condensar la humedad del aire y convertirla en agua, la cual luego se recoge en un depósito o se drena directamente. La gran ventaja de estas es que no requieren ventilación externa y son más eficientes energéticamente.
Esta eficiencia se debe, principalmente, a que reciclan y reutilizan el aire caliente generado durante el proceso de secado. De esta forma consiguen que el gasto energético sea mucho menor que en las secadoras que usan un proceso de evacuación.
Secadoras de bomba de calor
Por otro lado, tenemos las secadoras de bomba de calor, las cuales son aún más eficientes energéticamente. En este caso, lo que hacen es emplear una tecnología avanzada que recicla el calor generado durante el ciclo de secado y lo reutiliza, lo que reduce considerablemente el consumo de energía.
El principal cambio con los modelos anteriores es que estas secadoras operan a temperaturas más bajas que las secadoras más convencionales, por lo que también nos ayudan a preservar en mejor condiciones las prendas.
El gasto energético mensual, una combinación de diversos factores
Como ves, el hecho de elegir electrodomésticos con mayor o menos eficiencia, puede influir en el gasto energético de tu vivienda. Pero también existen otros factores que pueden hacerlo como la carga de ropa, la configuración de temperatura y tiempo de secado. E incluso también debemos tener en cuenta otras cuestiones como el mantenimiento regular del filtro de pelusas y la limpieza del conducto de ventilación en las secadoras de condensación. Por lo que deberemos tener en cuenta todo este conjunto y llevar a cabo pautas de consumo responsable si queremos que nuestra secadora de ropa gaste lo menos posible.