El boom de las inversiones en propiedades inmobiliarias está en pleno ascenso y las viviendas de alquiler ofrecen una de las opciones más emblemáticas a la hora de colocar los ahorros en un negocio en el cual se esperan ganancias. Pero una variable incondicional antes de siquiera pensar en comprar una vivienda es determinar si esta es capaz de ofrecer rentabilidad a su dueño (ganancias o beneficios económicos).
Saber a ciencia cierta si alquilar una vivienda es rentable a lo largo del tiempo es un punto crítico para cualquier inversor y para ello existen recursos de mucho valor, como las calculadoras de rentabilidad, un mecanismo de alta eficacia que permite ser consultado de modo online y que ofrece información fidedigna como un primer paso para seguir adelante en la compra e inversión en una vivienda destinada al alquiler.
La rentabilidad de una vivienda de alquiler
Entender el concepto de rentabilidad es importante antes de aprender a calcularlo, un mecanismo que indica en rendimiento obtenido a través del alquiler de una vivienda y que en definitiva beneficia al propietario del inmueble. Este beneficio económico trata de las rentas mensuales que hacen referencia al alquiler del piso y mediante las cuales se irá recuperando la inversión inicial que se llevó cabo al momento de la compra de la vivienda.
La rentabilidad del alquiler en España goza de una excelente salud en la actualidad porque es uno de los sectores de mayor estabilidad y, por lo tanto, es atrayente para muchos inversores. La rentabilidad bruta del alquiler alcanza cerca del 7% y está influenciada directamente por una multitud de factores determinantes, como por ejemplo la ubicación de la vivienda o la calidad de la construcción, entre otros.
La importancia de calcular la rentabilidad de una vivienda en alquiler
La rentabilidad de una vivienda será la encargada de determinar si la inversión que realizarás gozará de los adecuados márgenes de ganancias a lo largo del tiempo y determinar si es una opción de calidad o no. Tomando en plena consideración los necesarios gastos de inversión y de mantenimiento de la vivienda, para asegurar un contexto general y global de la inversión, ya que estos gastos influyen en la recuperación de la inversión.
Calculando la rentabilidad del alquiler de una vivienda
El cálculo de la rentabilidad de una vivienda en alquiler es sumamente sencillo, pero es importante distinguir un par de diferentes tipos de rentabilidad que existen y que podrían incidir en una confusión. De allí que sea necesario obtener conocimientos referentes a la rentabilidad bruta de alquiler de una vivienda y la rentabilidad neta del alquiler de la vivienda.
El cálculo de la rentabilidad bruta: Esta medida es perfecta para tener una idea sobre el rendimiento aproximado de una vivienda en alquiler, es decir, aquellos beneficios de la inversión y para su correcto cálculo se debe tener en consideración un par de valores: el precio de compra de la vivienda y la renta mensual que será cobrada como cuota de alquiler por la ocupación del piso.
El cálculo de la rentabilidad neta: Aquí se hace referencia al valor real de la operación, con suma consideración de las variables involucradas y de todos los gastos asociados. Se tiene que incluir a los gastos de la compraventa del inmueble, las posibles reformas llevadas a cabo, la cuota de la hipoteca contratada para adquirir la vivienda, los impuestos, seguros, suministros y gastos de la comunidad de vecinos.
Todo posible propietario o próximo inversor debe reconocer que se deben incluir todos los gastos y las posibles variables de interés al momento del cálculo de la rentabilidad de una vivienda, porque entre mayor nivel de detalle haya, más preciso será el valor hallado relacionado con la rentabilidad de una vivienda de alquiler.
La rentabilidad de una vivienda que será destinada al alquiler puede ser perfectamente hallada o calculada por expertos y las agencias inmobiliarias disponen de excelentes opciones (profesionales) para conseguir el valor real e indicarte si es rentable la inversión o no. Disminuyendo los riesgos y acercándose lo más posible al valor más real, además de ofrecer consejos y compañía durante todo el proceso de compra, reforma y alquiler de una vivienda.