A pesar de que no es una tarea que nos encante, la limpieza e higiene del hogar es fundamental para una buena salud en general. Además, para nadie es un secreto que sentir todo limpio, en orden y con olor agradable aporta una satisfacción y relajación difícil de comparar. Sin embargo, existe una lucha constante contra un sitio que se mancha con mucha facilidad: el inodoro, que incluso después de lavarlo, emana un molesto hedor.
Se recomienda asear la taza del WC diariamente, ya que cada día, inevitablemente, debemos usarlo. Ahora bien, si has pasado semanas de viaje o no has tenido tiempo de darle un mantenimiento adecuado, se acumulará el sarro e incluso las tuberías podrían obstruirse y ocasionar la terrible fetidez. Limpiadores químicos los hay por montón, pero… ¿Por qué gastar tanto dinero cuando la solución está en la cocina? Sigue leyendo y conoce cómo limpiar el inodoro con sal y dejarlo impecable fácilmente.
¿Qué pasa si colocas sal en el inodoro?
Más que solo limpiar, la sal común de cocina es un gran aliado en la limpieza con más beneficios de los que imaginas. El agua salada es capaz de disolver la grasa, sarro y suciedad incrustada, combatir marcas persistentes, al mismo tiempo que mitiga malos olores y actúa como un poderoso desinfectante matando microorganismos y bacterias a su paso. Se trata entonces de un agente limpiador casero asequible, seguro y eficaz. Sigue estos pasos y comprueba tú mismo/a que pasa si colocas sal en el inodoro:
- Para iniciar, lava el inodoro con el detergente que acostumbres usar para remover la suciedad adherida más fácil.
- Hecho esto, prepara una mezcla con dos tazas de agua caliente, 6 cucharadas de sal y una taza de vinagre blanco. Esta combinación ayudará a combatir manchas amarillas, microorganismos y funcionará como antigrasa.
- Una vez preparado este limpiador, viértelo en todo el interior de la taza, incluyendo los bordes y deja actuar durante 1 hora.
- Con la ayuda de una escobilla especial de inodoro, frota con fuerza para desprender la capa oscurecida de mugre y tira de la cadena.
Cómo limpiar el inodoro del sarro con sal, vinagre y bicarbonato
Todos odiamos esas asquerosas manchas marrones y amarillas en inodoros viejos que parecen imposibles de sacar, por suerte, no es tan complicado, solo necesitas los productos idóneos para esta tarea. Para incrementar la efectividad de la sal, sigue estos pasos:
- En un recipiente mezcla 3 cucharadas de bicarbonato con 3 cucharadas de sal fina y esparce en toda la superficie del inodoro. Antes de esto, tira de la cadena para que se humedezca y estos polvos se adhieran al interior.
- Rocía sobre ellos vinagre blanco en su estado puro y deja actuar por 2 horas.
- Restriega con un estropajo o cepillo las áreas manchadas y tira la cadena como de costumbre.
Esta combinación ayudará a blanquear y desinfectar la superficie gracias a la acidez del vinagre blanco, que, al juntarse con el poder abrasivo de la sal y el bicarbonato, desincrusta las manchas y desodoriza. Es un método 100% recomendado en invierno, ya que verter sal por las cañerías prevenir el congelamiento de las tuberías, puesto que el agua salada no se congela. Además, evita que proliferen bacterias en caso de que no se use el retrete por largos periodos de tiempo.