Todo aquel que sepa de calidad y elegancia, conoce y tiene prendas de gamuza en el armario, ya sea calzado, una chaqueta, cinturones, bolsos, una falda, guantes o cualquier otro accesorio. Sin embargo, la principal desventaja es que ligereza, comodidad y belleza van de la mano con su delicadeza, y que cuidar este textil y mantener su óptima limpieza, no es tan simple como meterla en la lavadora y esperar a que termine de lavarse.
En lo personal, me encanta este material. Su aspecto clásico aporta belleza, se adapta a la temporada y no pasa de moda, pero la verdad es que su precio es superior a otros tejidos y siempre me confundía la forma correcta de limpiarlo para no estropearlo. Por suerte, he conseguido información útil acerca de cómo limpiar tela de gamuza correctamente y alargar su vida útil ¿Te gustaría saber más acerca de ello? ¡Sigue leyendo, no es tan complicado como crees!
Cómo limpiar prendas y accesorios de gamuza paso a paso
La mayoría de las prendas son confeccionadas con la parte interna de la piel de borrego, no obstante, hoy en día también se fabrica ante de cabra, cerdo y ternero. Indiferentemente de su origen, lo primero que debes saber es que, a diferencia de otros materiales, no se puede lavar con agua y jabón, de hecho, se corre el riesgo de mancharla o deformarla si se expone a excesiva humedad y a productos abrasivos. La clave es la siguiente: prepara la tela, saca las manchas y protege la gamuza.
Cepilla la gamuza
Asegúrate que la prenda esté totalmente seca y cepilla en dirección a la fibra del material para aflojar y remover suciedad superficial. Para ello necesitarás un cepillo específico para limpiar gamuza, los cuales están hechos con una combinación de cerdas de metal y goma, ideales para eliminar marcas, grasas y peinar el tejido.
Trata las manchas pequeñas y fáciles
Primera —y última— advertencia: Jamás laves gamuza en la lavadora o perjudicarás de forma irremediable la tela. Si tus prendas o accesorios tienen manchas, trátalas de la siguiente manera:
Restos barro o mugre seca: Frota con un cepillo para gamuza toda la suciedad poco a poco hasta que vaya soltándose por completo. A pesar de que lo recomendable es hacerlo en una misma dirección, si notas que está muy profunda, hazlo en movimientos de ida y vuelta hasta llegar a la tierra adherida al ante.
Otra alternativa efectiva y segura para manchas pequeñas, pero rebeldes, es la goma de borrar, sí, la misma que usa tu peque para hacer las tareas. Frota el lugar afectado con movimientos circulares hasta que observes que desaparece y al final cepilla nuevamente.
¿Manchas difíciles? Saca la artillería pesada
No todas las manchas son iguales, algunas son más persistentes que otras y por más que cepilles, no saldrán tan fácilmente. En esos casos, prueba lo siguiente:
- Agua: Humedece el cepillo específico con agua templada y cepilla el área manchada rápidamente, pero sin llegar a ser rústico/a. Al final, pásalo en toda la superficie de la prenda para que no queden partes desiguales. Si es un zapato, antes de empezar introduce bolas de papel color blanco para que conserve su forma.
- Maicena: Si se trata de una mancha de aceite, sudor o humedad, esparce un poco de fécula de maíz (maicena) o bicarbonato de sodio sobre la marca, déjala actuar durante un par de horas para que absorba los residuos, recoge el producto con un cepillo y si quedan restos de grasa, limpia con un trapo suave humedecido con una solución de amoniaco y agua. ¡No olvides secar al final!
- Vinagre blanco: Impregna un paño suave (blanco) con una mezcla hecha con vinagre blanco al 5% y agua a partes iguales y frota la superficie manchada sin aplicar fuerza —no es necesario— luego deja que seque naturalmente.
- Manchas muy viejas: prepara una mezcla a partes iguales de talco, magnesia, leche y trementina.
Recomendaciones finales para cuidar la gamuza
- Cepilla regularmente para que la mugre no se adhiera tan fácilmente.
- Si la prenda está muy sucia y necesitas lavarla, hazlo rápidamente con una solución jabonosa tibia sin que se empape demasiado. Eso sí, no frotes la tela con fuerza ni la retuerzas, siempre restriega con una esponja o cepillo especial.
- Seca el interior de la prenda con toallas para evitar manchas de humedad y luego deja secar a temperatura ambiente colgado en una percha de forma recta.
- No apliques quitamanchas o blanqueadores químicos, mejor utiliza remedios caseros como los explicados anteriormente.
- No la expongas a la luz solar directa, su color es sensible.
- Evita guardarla en ambientes con excesiva humedad.
- Nunca la guardes en bolsas de plástico o transpirará, mejor almacénala en bolsas de tela de algodón o una funda de almohada.
No olvides que este material no se lleva bien con el agua, por lo que, si notas que el pronóstico es de lluvia, mejor no la uses ese día. Recuerda que sea cual sea el método de limpieza empleado, cuando termines aplica un protector para gamuza, ante o nobuk para que actúe como barrera impermeable contra el sucio y humedad.