La crisis energética que comenzó en el año 2022 continúa aún vigente y pasando factura a la mayor parte de los consumidores. De hecho, el comienzo de este nuevo año continúa marcado por la subida de la calefacción y también la de otros combustibles alternativos, como es el caso de los pellets.
Estos últimos (los pellets) vieron su precio incrementado debido a la alta demanda por parte de los consumidores, algo que ha llevado a las empresas que crean este material a buscar ciertas alternativas para su desarrollo, y hoy vamos a hablarte de una de ellas.
El precio de los pellets, un problema para los consumidores
Para entender la necesidad de optar por otras materias primas a la hora de fabricar pellets, es importante ver el contexto en el que se encuentra este combustible actualmente.
El conflicto entre Rusia y Ucrania, ha provocado una crisis energética que ha afectado al precio de la mayor parte de los combustibles y, aunque el pellet no se ha visto directamente afectado, la mayor demanda del mismo también ha provocado un encarecimiento.
Esto, unido con la escasez de recursos de la que hablan los fabricantes, ha provocado que se abran nuevas líneas de investigación para emplear otras materias primas a la hora de generarlos.
La turba de coco, una alternativa económica para crear pellets con los que alimentar tu calefacción
De todos los materiales con los cuales se están llevando a cabo pruebas, hay dos que destacan por su sencillez y también por ser una materia prima barata: el lino y la turba de coco.
Este último se está desmarcando como la mejor alternativa porque ya se están obteniendo grandes resultados con la misma en los cultivos de ciertos productos, como el pimentón, utilizándose como un sustrato y abono natural del suelo.
Pero, ¿qué es la turba de coco?
Básicamente, es un material orgánico que se crea a partir de los restos que rodean la cáscara de este fruto y tiene muchas aplicaciones, entre ellas las que hemos citado más arriba.
Todo ello ha llevado a Corea del Sur a usar este material con el objetivo de fabricar pellets de turba de coco y así reducir sus importaciones de pellets de madera, los cuales tienen un coste mucho más elevado. De hecho, han sido tres las grandes empresas coreanas que comenzarán a utilizar este material como base para la creación de pellets a partir del año 2025.
Los pellet, un combustible de biomasa obtenido a partir de la madera, se han convertido en una fuente cada vez más popular de energía para calentar los hogares. Sin embargo, el precio de los pellets se ha incrementado considerablemente en los últimos años, lo que ha puesto en una situación difícil a los consumidores. Esto se debe principalmente a la demanda creciente de pellets, que ha llevado a una escasez de la materia prima, además de los aumentos de los precios de la madera en sí. También hay otros factores, como la subida de los precios del combustible, que contribuyen a los aumentos de los precios de los pellets. Para aliviar el problema, hay varias medidas que se pueden tomar, como aumentar la producción de pellets para satisfacer la demanda, aumentar la eficiencia en la producción para reducir los costos, y promover la producción de pellets a partir de materias primas alternativas, como los restos de la agricultura.
Alternativas a las estufas de pellets que te ayudan a calentar tu vivienda
Como vemos, el futuro de los pellets parece apostar por el uso de otras materias primas para la creación de este tipo de recursos. Pero, en cualquier caso, aún nos queda esperar unos años hasta poder disfrutar de este nuevo combustible que promete ser económico.
Por eso, mientras tanto, es importante elegir otras alternativas con las que podamos ahorrar energía, como pueden ser las clásicas estufas de leña.
Estos dispositivos tienen las mismas ventajas que las estufas de pellets, pero incorporan una más: un combustible mucho más económico y accesible a todo tipo de públicos. Así que, si quieres conseguir el máximo ahorro posible en tu calefacción, es una alternativa a considerar.
El poder calorífico de los pellets: una excelente calefacción
Aunque suene increíble, el pellet es la única clase de biomasa que se puede comparar con los combustibles fósiles. De varios estudios científicos se ha extraído su poder calorífico real: 4,8 kWh/kg. No solo eso, sino que además se ha comprobado que dos kilos de pellets son el equivalente a un litro de petróleo, ni más ni menos. Estas razones son más que suficientes para, por lo menos, considerar a los pellets como una fuente de calefacción más que aceptable. ¡La biomasa al poder!
Los mejores tipos de pellets para una buena calefacción
Tienes que fijarte en los logos clave de los sacos de pellets: los certificados ENplus A1 y DINplus. Son sellos de garantía y de calidad que reflejan que el material ha pasado por controles estrictos antes de venderse. El ENplus A1 es el mejor pellet que puedes adquirir, ya que está hecho con madera virgen y restos de madera sin ningún tratamiento químico. En cuanto al DINplus, es un certificado europeo que tiene una calidad similar. Ya lo sabes: cuando vayas a comprar tus pellets para tu sistema de calefacción, fíjate mucho en este detalle.
