El gobierno mantiene una política de ayuda social para muchas personas catalogadas como frágiles y cuyas profesiones no mantienen una estabilidad dentro de la economía española, en este grupo se incluyen a los artistas. Una medida que sin dudas busca una manera de ayudar a este sector de la población desprovisto de mejoras laborales y de contratación, con una ayuda que logra llegar hasta los 600 euros mensuales, que podrían funcionar para pagar el alquiler de vivienda.
La solicitud formal de esta ayuda ya puede hacerse y está plenamente destinada a los trabajadores del ámbito cultural y artístico de la nación, que se encuentren actualmente en situación de desempleo y funciona como una especie de subvención. Este dinero podría perfectamente suplir las necesidades de vivienda o de alimentación de muchos ciudadanos que mantienen una dedicación exclusiva al medio artístico.
Ayuda para artistas que sirve para vivienda
En este grupo se incluyen a los trabajadores de las artes escénicas, musicales y audiovisuales, además de aquellos que llevan a cabo actividades auxiliares y técnicas requeridas para el pleno desarrollo de estas actividades. De allí que puedan beneficiarse los trabajadores directos e indirectos, una medida vista con mucho positivismo y que evidentemente es un respiro para la gran mayoría de ellos, que están bajo condición de alquiler con respecto a la vivienda principal.
Es importante destacar que es una ayuda completamente incompatible con el trabajo por cuenta propia, aunque el trabajo por cuenta propia no implica una exclusión obligatoria de este tipo de seguridad social, así como con cualquier otro tipo de prestación que la persona reciba (renta mínima, salario social, renta de inclusión u otras ayudas establecidas por la administración pública, sea nacional o de las diversas Comunidades Autónomas).
Paliar los gastos de alquiler de vivienda
Esta ayuda es perfecta para conseguir un respiro eventual de al menos cuatro meses de tiempo y disponer de los fondos necesarios para hacer frente al alquiler de vivienda. Uno de los gastos que sumado al de la alimentación representan a los que mayores recursos requieren por parte de los ciudadanos, por lo que la acogida de los artistas a nivel nacional se espera que sea representativa y categórica con respecto a la solicitud de esta ayuda.
Requisitos, duración y cuantía de la ayuda
Todas aquellas personas que quieran recibir esta subvención no deberán tener derecho a la prestación contributiva ordinaria por desempleo y además deben acreditar 60 días dados de alta con una prestación real de servicios dentro de la actividad artística desarrollada. Esta situación debe estar dentro de un periodo de tiempo a los 18 meses anteriores a la entrada en una situación legal de desempleo o en su defecto, en el momento en el que finalizó la obligación de cotización.
La cuantía a ser percibida en forma de subvención será igual al 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), un indicador que se irá actualizando mes a mes. Aunque toda norma tiene su excepción y esta será cuando la media diaria relacionada con las bases de cotización de los últimos dos meses de prestación real de servicios en dicha actividad artística sea superior a los 60 euros, hará que la ayuda sea igual al 100% del (IPREM)
El IPREM mensual está actualmente cotizándose en 600 euros, lo que indica que este monto será el máximo a cobrar con relación a esta ayuda gubernamental para los artistas y en caso de que la ayuda sea del 80% del IPREM, entonces el cobro para cada artista sería de 480 euros. Una cantidad que, aunque relativamente baja, puede perfectamente resolver los problemas relacionados con el pago de alquiler de vivienda de muchos de estos ciudadanos artistas.
Con una duración máxima estipulada de cuatro meses para los beneficiarios y con una tramitación y solicitud de la misma que se llevara a cabo, como se indica en el sitio web del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), donde establece que bastara con entrar en esta sede electrónica y llevar a cabo el respectivo trámite. Además, está la posibilidad de hacerlo de forma presencial en cualquiera de las oficinas de prestaciones mediante cita vía electrónica o telefónica.