El queso es un alimento muy popular. Puede tomarse como tapa o acompañamiento de una bebida, como picoteo, entrante e incluso en algunas partes del mundo es tradición tomarlo como postre.
Existe una amplia variedad de quesos para todos los gustos. Incluso hay quesos para aquellas personas a las que no le hace mucha gracia el sabor del queso. Al final casi todo el mundo consume este alimento, pero puede que casi nadie lo haga de la manera correcta. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dado una serie de indicaciones a tener en cuenta cuando vayamos a comer queso. Veamos si cumples alguna.
Comer queso de la manera adecuada
Una de las primeras cosas que tenemos que tener en cuenta cuando vayamos a disfrutar de una buena tabla de quesos es que, si lo tenemos guardado en la nevera, es conveniente sacarlo un par de horas antes para que vaya tomando una temperatura adecuada. El frío en exceso puede afectar tanto a la percepción de su sabor como a la textura.
También es preferible comprar el queso en el mismo día o las horas previas a su consumo, especialmente en los quesos con poca curación.
El corte del queso es clave
En la mayoría de las ocasiones, el queso debe cortarse en láminas finas, un grosor que no supere los 2 milímetros. Para esto es importante un cuchillo bien afilado y sin dientes que desmigajen el producto. Además, es conveniente que el cuchillo este templado con agua caliente para que incida mejor en el queso y no para la parte que queremos comer.
Otro truco que puede ayudarnos a conseguir un corte limpio del queso es untar un poco de aceite en la hoja. Esto hará que el cuchillo deslice mejor al tiempo que el aceite forma una película sobre la superficie del queso que evita que se deshaga.
Un corte para cada tipo de queso
Como hemos dicho al principio, hay quesos para todos los gusto y no todos se cortan o se presentan igual cuando vamos a consumirlos.
En los quesos de corteza comestible como el brie, no es necesario retirar la corteza. Para los quesos azules es más recomendable un corte en tacos o en tiras cuadradas. En los quesos de textura blanda o mantecosa se puede hacer una apertura circular y retirar la corteza como una tapadera para disfrutar del interior en panes o tostas. En los quesos esféricos o de bola, lo ideal es hacer cuadrados. Por ultimo, para los quesos de rueda, lo más recomendable es hacer rebanadas triangulares —como cuando cortas una pizza pero haciendo más porciones— .
Ten en cuenta esto al comprar queso
A la hora de comprar queso lo ideal es acudir a un establecimiento que conozcamos. De esta manera podemos asegurarnos de que existe una rotación de los productos expuestos.
Los quesos que llevan demasiado tiempo abiertos o a la intemperie pueden mostrar algunos deterioros. Evita especialmente llevarte aquellos que muestren grietas o desperfectos en la corteza o la superficie, ya que su interior podría estar dañado.