El jamón ibérico es uno de los mayores exponentes de la gastronomía española y a nivel mundial, pero hay un lugar en el que su calidad y elaboración tradicional sobrepasa todas las expectativas que tanto amantes de este alimento como neófitos puedan tener.
Se trata de Guijuelo y su inigualable jamón ibérico de bellota. Este pequeño pueblo, situado al sur de la provincia de Salamanca, en Castilla y León , se ha ganado el reconocimiento como un destino turístico por excelencia gracias a la calidad y la tradición que rodea la elaboración de este delicioso alimento.
Un lugar privilegiado para la producción del jamón ibérico
Guijuelo se ubica en la parte sur de Salamanca, en Casilla y León, en un enclave montañoso estratégico rodeado de dehesas, lo que le brinda una situación geográfica ideal para la producción de este manjar. El clima frío de la región, con inviernos rigurosos y veranos suaves, contribuye de manera significativa a la calidad del jamón ibérico de Guijuelo. Además, el entorno natural proporciona a los cerdos ibéricos una alimentación privilegiada, lo que confiere al jamón un sabor y una textura únicos
Así es el probable mejor jamón del mundo
El jamón ibérico de Guijuelo se distingue por una serie de características que lo hacen inconfundible. Una de ellas es su intenso sabor, resultado de la combinación de la genética de los cerdos ibéricos y su alimentación natural con bellotas y pastos verdes.
Cada pieza de jamón es cuidadosamente seleccionada y curada durante un largo periodo de tiempo, ente 36 y 48 meses, permitiendo que los sabores se desarrollen y se intensifiquen. La infiltración de grasa en la carne es otro de los elementos distintivos, ya que aporta jugosidad y un toque de untuosidad que se deshace en el paladar.
Guijuelo, el paraíso del jamón ibérico
Si visitas Guijuelo, tendrás la oportunidad de sumergirte en el fascinante mundo del jamón ibérico. Podrás recorrer las dehesas donde los cerdos ibéricos se alimentan de bellotas y descubrir los secretos de su cría y cuidado. Además, podrás visitar las bodegas y secaderos donde el jamón se cura lentamente, aprendiendo sobre los métodos tradicionales que se han transmitido de generación en generación.
Para los amantes del buen comer, Guijuelo ofrece una variedad de establecimientos donde podrás degustar el exquisito jamón ibérico en todas sus formas. Desde restaurantes especializados hasta tiendas locales. Además, la localidad organiza festivales y eventos que celebran la cultura del jamón ibérico, brindando la oportunidad de sumergirse aún más en esta delicia culinaria.
Entre los lugares destacado en los que podrás vivir todas estas experiencias están el Museo de la Industria Chacinera, el mejor lugar para aprender de las técnicas tradicionales y moderna de trasformación y conservación de los productos derivados del cerdo ibérico a través de divertidos juegos interactivos y muestras de productos.
Otros lugares en los que perderte en el mundo del jamón ibérico de Guijuelo son El Torreón y la Plaza Mayor, escenario de catas organolépticas de las diferentes partes del jamón de bellota ibérico, además de poder degustar otros productos de la región derivados del cerdo, como sus espectaculares embutidos.
Cómo degustar correctamente el jamón ibérico de Guijuelo
Un manjar de este calibre debe ser disfrutado como es debido. En primer lugar, se debe acompañar con una bebida que permita maximizar este disfrute, y la mejor opción, según muchos expertos, es una copa de vino blanco o rosado. En segundo lugar, este jamón se debe cortar en lonchas finas y con un cuchillo jamonero, pues así lograrás que todas tengan la cantidad de grasa ideal para tener una experiencia increíble en boca. Por último, debes coger las lonchas de jamón de Guijuelo por el magro y comértelas por la parte de la grasa. Solo así, lograrás percibir en todo su esplendor ese sabor único.