El contrato de compraventa es uno de los documentos de mayor importancia al momento de cualquier transacción o negociación que incluya una vivienda o un inmueble, por lo que todas aquellas personas que hayan decidido dar el paso de comprar o de vender un inmueble deben mantener la plena certeza de que este contrato pueda ofrecer todo lo relativo a la validación de la operación inmobiliaria y que se debe mantener la máxima claridad antes de estampar la firma.
Desarrollar un contrato de compraventa de una vivienda es un punto clave y fundamental para tener éxito, por lo que se deben manejar ciertos aspectos fundamentales, para que el proceso sea efectivo y perfectamente reglamentado. Este accionar apegado a la Ley evitará posibles modificaciones futuras, ahorrando tiempo, dinero y manteniendo un óptimo apego a las reglamentaciones legales que rigen la materia.
Puntos clave del contrato de compraventa de vivienda
La validación del negocio de compraventa de un inmueble es el fin supremo de todo contrato de vivienda, este documento no obliga a las partes a la obligatoria firma de un contrato privado, ya que por autonomía y por Ley el mismo contrato de compraventa es capaz de englobar la correcta formalización del acto de compra o de venta del inmueble.
Es relevante la minuciosa verificación de muchos y variados aspectos para evitar problemas a futuro y conseguir que la compraventa de una vivienda sea una operación apegada a la Ley. Con ello es posible garantizar que la inversión en un inmueble pueda ofrecer los frutos esperados y no convertirse en un verdadero dolor de cabeza, que acompañará al comprador por un buen tiempo.
La estructura de un contrato de compraventa de vivienda
Primeramente, determinar y exponer quienes son las partes que están involucradas en el acuerdo, a nombre de quién está la vivienda y si se trata de un único titular, entonces deberá ser esta persona quien deba firmar el contrato junto al comprador. En el caso de que se trate de una vivienda en matrimonio, se requiere de la firma de ambos cónyuges, para la correcta validación de la compraventa del inmueble.
Son obligatorios los datos del o los vendedores y del o los compradores de la vivienda, además de la inclusión del precio de la venta. Este precio de venta fijado en el contrato será el que regirá las operaciones y no podrá ser modificado con relación a la cuantía a pagar después de la firma del mismo. También se debe incluir la fecha de entrega de las llaves y reconocer que la firma del contrato no implica la instalación inmediata del comprador en la vivienda.
El contrato de compraventa cuando existen cargas
Formalizar la compraventa de una vivienda es posible aun cuando existan cargas en el inmueble, estas pueden ser una hipoteca y es una cuestión que los compradores tienen que mantener en consideración. El comprador por ser el agraviado tiene que mantener la iniciativa de informarse sobre el estatus de la vivienda y en caso de estar anclada a una hipoteca, verificar qué es lo que más le conviene: subrogarse a la hipoteca del vendedor o en su defecto cancelar la hipoteca.
Si la vivienda está libre de cargas, es de obligatoriedad que en el respectivo contrato aparezca o se indique que la parte vendedora ha manifestado que la propiedad se encuentra libre de gravámenes, ocupantes o cargas y que además se encuentra al día con los pagos y las cuotas obligatorias de la Comunidad de Vecinos y de los tributos correspondientes. El comprador deberá verificar que todos estos pagos estén debidamente respaldados y cumplimentados.
Seguir estas indicaciones es de gran importancia para lograr que la operación de compraventa de una vivienda sea además de exitosa, libre de riesgos y apegada a lo que establece la Ley. Garantizando de un modo eficiente la exoneración de problemas futuros con cargas, impuestos y otros problemas relacionados con la compraventa de una vivienda y en general de cualquier propiedad inmobiliaria con fines de alquiler, de compra o de inversión.